Como crear potentes visualizaciones: ver es creer
2017-03-28
Como crear potentes visualizaciones: ver es creer
En esta serie de artículos estamos brindando los conocimientos necesarios para que aprendas a provocarte y utilizar la autohipnosis de manera efectiva. Si quieres asegurarte de leerlos todos suscríbete a nuestra newsletter.
Esta semana hablaremos de las visualizaciones. Todos tenemos la capacidad de visualizar aunque es cierto que algunas personas la tienen mucho más desarrollada que otras.
Del mismo modo que podemos utilizar palabras para comunicarnos con la mente profunda, también podemos utilizar imágenes para transmitir sugestiones. El subconsciente no distingue lo real de lo imaginario, es por esa razón que podemos despertar asustados y bañados en sudor de un sueño, o que al ver una película nos emocionemos o estemos tensos y agitados si es de miedo.
La visualización efectiva es una capacidad que todos tenemos, convertirla en habilidad es una tarea que requiere dedicación. Por lo tanto te recomendamos practicar, practicar y practicar.
Para empezar a utilizarlas puedes emplear nuestra grabación “Reprogramación hipnótica” de nuestro canal de youtube o en el link que aparece al final de este artículo. En nuestro canal HipnosisparatodosTV encontrarás las versiones femenina y masculina.
Esta grabación emplea la visualización como herramienta fundamental y la emoción como carburante. Está concebida para provocar cambios en hábitos, comportamientos y actitudes. Para obtener resultados la repetición es necesaria.
“Somos aquello que hacemos repetidamente”
Aristóteles
Las visualizaciones son una muy poderosa herramienta en nuestra práctica de autohipnosis. Podemos utilizar visualizaciones asociadas con sugestiones y metáforas o en solitario.
En solitario simplifica el proceso: Entras en trance hipnótico, profundizas (en sucesivos artículos especificaremos como hacerlo), imaginas lo que quieres conseguir y vuelves a tu estado habitual.
Si imaginamos algo intensamente provoca una respuesta física, vamos a comprobarlo:
Imagina un limón, el color, su piel brillante, lisa. Ahora imagina como lo cortas y notas su intenso olor y quizás alguna pequeña gota te salpica. Ahora imagina como sacas su zumo con un exprimidor, nota su textura, el aroma es cada vez más intenso y finalmente lo acercas a tu boca y dejas que caigan algunas gotas, imagina su penetrante sabor. ¿Sientes algún efecto? Probablemente estás con saliva en tu boca.
Nuestro cuerpo y nuestra mente subconsciente responden a la imaginación. Utilizando correctamente nuestra mente consciente podemos influir en el subconsciente.
Tu subconsciente no distingue la diferencia entre algo que has imaginado vividamente y algo que has experimentado realmente, si te imaginas superando una dificultad tu mente buscará en tu entorno la información y los recursos que necesitas para hacerlo. El proceso de visualización es como estar soñando pero siendo capaz de dirigir ese sueño hacia donde tú quieres.
Lo que esperamos tiene una poderosa tendencia a realizarse. El cerebro y el sistema nervioso responden a imágenes, no importa si esas imágenes vienen del exterior a través de los sentidos, o del interior utilizando tu facultad de imaginar. Investigaciones muestran que cuando visualizamos una actividad el cerebro utiliza los mismos procesos neurológicos que cuando la realiza.
Visualizar incrementa y estimula tu motivación, ideas y revelaciones surgen en la mente en cualquier momento, parece como si las cosas e ideas de repente aparecen y vienen hacia ti o quizás tú vas más fácilmente hacia ellas.
La visualización permite mantener vivo nuestro sueño, especialmente en los momentos difíciles. Es como si nos estuviéramos entrenando para realizar algo con nuestra imaginación, acostumbrando a nuestra mente y también a nuestro cuerpo a esa situación.
Al realizar tus visualizaciones es muy importante que te imagines a ti mismo habiendo alcanzado plenamente tu objetivo. Plantéate ¿Cómo serás cuando seas esa persona? ¿Qué cambiará en ti como resultado de obtener lo que quieres lograr? ¿Qué cambios habrá en tu estilo de vida, en lo que haces habitualmente, en tus relaciones con los demás?
Es necesario que te imagines a ti mismo pensando, sintiendo y actuando como esa persona. Es trascendental que reproduzcas intensamente los sentimientos asociados a lograr tu objetivo. Así, los sentimientos son el mundo del subconsciente, tu mente profunda sabe lo que tú quieres. Y te lleva por el camino hacia tu objetivo, sin que a veces tu parte consciente se de cuenta de lo que está pasando.
Imagina que quieres superar una incómoda timidez en fiestas o acontecimientos sociales. Te induces un estado hipnótico y empiezas a imaginar un contexto sobre una fiesta. Imagínate yendo hacia esa fiesta, mentalmente inspecciona tu aspecto y vestuario. Mientras confirmas que todo está perfecto, date a ti mismo una inyección de confianza y déjala crecer hasta sentirte estupendamente.
Si algo no está bien, es tu sueño, tienes un poder infinito para solucionarlo. Si quieres un Rólex, puedes proporcionártelo, el reloj más bonito, brillante y caro que ha existido nunca. Es tu sueño y puedes hacer lo que tú quieras, cambiar tu peinado, crecer o saltar por encima de edificios.
Sigue hasta llegar a la fiesta, saluda a tu anfitrión notando admiración en su mirada, escuchando como te alaba, contento de verdad de que hayas asistido a su fiesta. Entonces realiza el proceso de conocer a alguien, una persona que te intimide realmente. Imagínate diciendo exactamente lo más correcto, muéstrate inteligente, divertido, dominando la situación.
Escucha el tono de tu voz, seguro, confiado. Muévete entre los invitados como un político, saludando y siendo bienvenido. Si algo no funciona vuelve atrás y repítelo hasta que te veas a ti mismo haciéndolo todo perfectamente. Llévate a ti mismo por toda la situación, desde que llegas hasta que te vas y imagínate haciéndolo perfectamente bien.
Esto aumentará tu confianza, y construirá un conjunto de “recuerdos” para ti de manera que la próxima vez que vayas a una fiesta podrás recuperar estos “recuerdos” y obtendrás la confianza que imaginaste que tenías. Puedes hacer lo mismo con cualquier situación, hablar en público, enfrentarte con tu jefe, o pedir una cita con alguien.
Hablamos de visualización pero se trata más bien de fantasía sensorial, se trata de imaginar las situaciones con todos nuestros sentidos: vista, oído, tacto, olfato e incluso sabor.
La imaginación empieza a crear un patrón en la mente, una imagen de posibilidades. Este mapa de imagen sienta las bases para la esperanza y la expectativa positiva. Si utilizamos imágenes para incrementar nuestra creencia de que algo es posible, esa creencia empieza a generar una profecía autocumplida positiva.
La sugestión visual toma el objetivo final y lo convierte en una imagen, los mismos principios utilizados con las sugestiones verbales se aplican a las visuales (ver artículo anterior Como establecer objetivos y poderosas sugestiones). Haz que las imágenes estén orientadas a un presente/futuro, que sean positivas, específicas, factibles, que estén personalizadas.
Haz que sean tan ricas sensorialmente como puedas, tienes que convertir tus objetivos en imágenes vívidas como películas tan ricas como la vida misma. Puedes facilitar el proceso imaginando una pantalla en la que se desarrolla tu visualización.
Puedes verte a ti mismo asociado, es decir a ti mismo en esa pantalla, la carga emotiva y por lo tanto la eficacia es así más grande o disociado es decir contemplando la acción como un espectador, mejor así en situaciones que puedan tener una contenido desagradable.
Se preciso en los detalles. Las imágenes deberán reflejar el éxito total que deseas. Si la imagen que obtienes es vaga o poco definida no te preocupes, llénala de sentimiento, acompañar las imágenes con los demás sentidos las hace más poderosas. La imaginación es una habilidad, la desarrollas practicando.
Permítete creer. Mantén la convicción de que tu sueño se hará realidad. Da vida a tus imágenes con sentimientos intensos. No dejes lugar a la duda. Actúa como si estuviera garantizado. La imagen clara del futuro nos ayuda a empezar a creer que ese objetivo es posible hasta convertirse en real.
Ver es creer.
Video: Reprogramación hipnótica
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Esta semana hablaremos de las visualizaciones. Todos tenemos la capacidad de visualizar aunque es cierto que algunas personas la tienen mucho más desarrollada que otras.
Del mismo modo que podemos utilizar palabras para comunicarnos con la mente profunda, también podemos utilizar imágenes para transmitir sugestiones. El subconsciente no distingue lo real de lo imaginario, es por esa razón que podemos despertar asustados y bañados en sudor de un sueño, o que al ver una película nos emocionemos o estemos tensos y agitados si es de miedo.
La visualización efectiva es una capacidad que todos tenemos, convertirla en habilidad es una tarea que requiere dedicación. Por lo tanto te recomendamos practicar, practicar y practicar.
Para empezar a utilizarlas puedes emplear nuestra grabación “Reprogramación hipnótica” de nuestro canal de youtube o en el link que aparece al final de este artículo. En nuestro canal HipnosisparatodosTV encontrarás las versiones femenina y masculina.
Esta grabación emplea la visualización como herramienta fundamental y la emoción como carburante. Está concebida para provocar cambios en hábitos, comportamientos y actitudes. Para obtener resultados la repetición es necesaria.
“Somos aquello que hacemos repetidamente”
Aristóteles
Las visualizaciones son una muy poderosa herramienta en nuestra práctica de autohipnosis. Podemos utilizar visualizaciones asociadas con sugestiones y metáforas o en solitario.
En solitario simplifica el proceso: Entras en trance hipnótico, profundizas (en sucesivos artículos especificaremos como hacerlo), imaginas lo que quieres conseguir y vuelves a tu estado habitual.
Si imaginamos algo intensamente provoca una respuesta física, vamos a comprobarlo:
Imagina un limón, el color, su piel brillante, lisa. Ahora imagina como lo cortas y notas su intenso olor y quizás alguna pequeña gota te salpica. Ahora imagina como sacas su zumo con un exprimidor, nota su textura, el aroma es cada vez más intenso y finalmente lo acercas a tu boca y dejas que caigan algunas gotas, imagina su penetrante sabor. ¿Sientes algún efecto? Probablemente estás con saliva en tu boca.
Nuestro cuerpo y nuestra mente subconsciente responden a la imaginación. Utilizando correctamente nuestra mente consciente podemos influir en el subconsciente.
Tu subconsciente no distingue la diferencia entre algo que has imaginado vividamente y algo que has experimentado realmente, si te imaginas superando una dificultad tu mente buscará en tu entorno la información y los recursos que necesitas para hacerlo. El proceso de visualización es como estar soñando pero siendo capaz de dirigir ese sueño hacia donde tú quieres.
Lo que esperamos tiene una poderosa tendencia a realizarse. El cerebro y el sistema nervioso responden a imágenes, no importa si esas imágenes vienen del exterior a través de los sentidos, o del interior utilizando tu facultad de imaginar. Investigaciones muestran que cuando visualizamos una actividad el cerebro utiliza los mismos procesos neurológicos que cuando la realiza.
Visualizar incrementa y estimula tu motivación, ideas y revelaciones surgen en la mente en cualquier momento, parece como si las cosas e ideas de repente aparecen y vienen hacia ti o quizás tú vas más fácilmente hacia ellas.
La visualización permite mantener vivo nuestro sueño, especialmente en los momentos difíciles. Es como si nos estuviéramos entrenando para realizar algo con nuestra imaginación, acostumbrando a nuestra mente y también a nuestro cuerpo a esa situación.
Al realizar tus visualizaciones es muy importante que te imagines a ti mismo habiendo alcanzado plenamente tu objetivo. Plantéate ¿Cómo serás cuando seas esa persona? ¿Qué cambiará en ti como resultado de obtener lo que quieres lograr? ¿Qué cambios habrá en tu estilo de vida, en lo que haces habitualmente, en tus relaciones con los demás?
Es necesario que te imagines a ti mismo pensando, sintiendo y actuando como esa persona. Es trascendental que reproduzcas intensamente los sentimientos asociados a lograr tu objetivo. Así, los sentimientos son el mundo del subconsciente, tu mente profunda sabe lo que tú quieres. Y te lleva por el camino hacia tu objetivo, sin que a veces tu parte consciente se de cuenta de lo que está pasando.
Imagina que quieres superar una incómoda timidez en fiestas o acontecimientos sociales. Te induces un estado hipnótico y empiezas a imaginar un contexto sobre una fiesta. Imagínate yendo hacia esa fiesta, mentalmente inspecciona tu aspecto y vestuario. Mientras confirmas que todo está perfecto, date a ti mismo una inyección de confianza y déjala crecer hasta sentirte estupendamente.
Si algo no está bien, es tu sueño, tienes un poder infinito para solucionarlo. Si quieres un Rólex, puedes proporcionártelo, el reloj más bonito, brillante y caro que ha existido nunca. Es tu sueño y puedes hacer lo que tú quieras, cambiar tu peinado, crecer o saltar por encima de edificios.
Sigue hasta llegar a la fiesta, saluda a tu anfitrión notando admiración en su mirada, escuchando como te alaba, contento de verdad de que hayas asistido a su fiesta. Entonces realiza el proceso de conocer a alguien, una persona que te intimide realmente. Imagínate diciendo exactamente lo más correcto, muéstrate inteligente, divertido, dominando la situación.
Escucha el tono de tu voz, seguro, confiado. Muévete entre los invitados como un político, saludando y siendo bienvenido. Si algo no funciona vuelve atrás y repítelo hasta que te veas a ti mismo haciéndolo todo perfectamente. Llévate a ti mismo por toda la situación, desde que llegas hasta que te vas y imagínate haciéndolo perfectamente bien.
Esto aumentará tu confianza, y construirá un conjunto de “recuerdos” para ti de manera que la próxima vez que vayas a una fiesta podrás recuperar estos “recuerdos” y obtendrás la confianza que imaginaste que tenías. Puedes hacer lo mismo con cualquier situación, hablar en público, enfrentarte con tu jefe, o pedir una cita con alguien.
Hablamos de visualización pero se trata más bien de fantasía sensorial, se trata de imaginar las situaciones con todos nuestros sentidos: vista, oído, tacto, olfato e incluso sabor.
La imaginación empieza a crear un patrón en la mente, una imagen de posibilidades. Este mapa de imagen sienta las bases para la esperanza y la expectativa positiva. Si utilizamos imágenes para incrementar nuestra creencia de que algo es posible, esa creencia empieza a generar una profecía autocumplida positiva.
La sugestión visual toma el objetivo final y lo convierte en una imagen, los mismos principios utilizados con las sugestiones verbales se aplican a las visuales (ver artículo anterior Como establecer objetivos y poderosas sugestiones). Haz que las imágenes estén orientadas a un presente/futuro, que sean positivas, específicas, factibles, que estén personalizadas.
Haz que sean tan ricas sensorialmente como puedas, tienes que convertir tus objetivos en imágenes vívidas como películas tan ricas como la vida misma. Puedes facilitar el proceso imaginando una pantalla en la que se desarrolla tu visualización.
Puedes verte a ti mismo asociado, es decir a ti mismo en esa pantalla, la carga emotiva y por lo tanto la eficacia es así más grande o disociado es decir contemplando la acción como un espectador, mejor así en situaciones que puedan tener una contenido desagradable.
Se preciso en los detalles. Las imágenes deberán reflejar el éxito total que deseas. Si la imagen que obtienes es vaga o poco definida no te preocupes, llénala de sentimiento, acompañar las imágenes con los demás sentidos las hace más poderosas. La imaginación es una habilidad, la desarrollas practicando.
Permítete creer. Mantén la convicción de que tu sueño se hará realidad. Da vida a tus imágenes con sentimientos intensos. No dejes lugar a la duda. Actúa como si estuviera garantizado. La imagen clara del futuro nos ayuda a empezar a creer que ese objetivo es posible hasta convertirse en real.
Ver es creer.
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