¿Adelgazar con fuerza de voluntad?
.jpg "¿Adelgazar con fuerza de voluntad?")
2015-10-29
¿Adelgazar con fuerza de voluntad?
La fuerza de voluntad es poco efectiva para eliminar grasa. En absoluto es mi intención despreciar esta facultad que sin duda podemos y debemos potenciar. Pero si quiero poner de manifiesto que la fuerza de voluntad es poco útil para adelgazar. Los planes que hacemos tan frecuentes de “a partir de ahora solo voy a comer. . .” no llegan muy lejos y suelen generar frustración y estrés.
Parece que, a pesar de que la experiencia nos demuestra lo contrario, creemos que la próxima vez será diferente. De alguna manera misteriosa la fuerza de voluntad surgirá de manera espontánea y conseguiremos nuestro objetivo. Pero:
Todos tenemos una cantidad determinada de fuerza de voluntad, tarde o temprano se acaba como la batería del móvil. Piensa en la cantidad de veces que tienes que superar situaciones en las que tienes que renunciar a algo que te apetece a lo largo del día, día tras día. Si lo tienes que hacer a base de fuerza de voluntad es algo agotador, casi sobrehumano.
Además la fuerza de voluntad requiere concentración. Tenemos que tener muy claro lo que tenemos que hacer y además tenerlo presente todo el tiempo. Pero en la vida constantemente suceden cosas que nos distraen. Comer fuera de casa, un disgusto, una fiesta y olvidamos rápidamente nuestros buenos propósitos.
Al hacer cualquier plan basado en la fuerza de voluntad utilizamos nuestra mente racional. “Sabemos” lo que queremos hacer. Pero a la hora de comer lo racional pasa a segundo plano y aparece nuestro mundo emocional. “Sentimos” hambre, a veces, porque estamos estresados, ansiosos, cansados, enfadados. . . La comida es a menudo una recompensa que nos concedemos y comemos automáticamente todo lo que pensamos sobre el tema no cuenta, no sirve
Decirte a ti mismo que lo que necesitas es ser más fuerte, en realidad otra persona, y pensar que la fuerza de voluntad crecerá mágicamente no es una solución realista. Creer que lo que necesitas es más fuerza de voluntad sólo te genera estrés y frustración lo contrario de lo que necesitas. Deja de sentirte culpable por no ser fuerte sólo te perjudica. Piensa en la fuerza de voluntad que tienes cada día para levantarte y trabajar, en como te despiertas a cualquier hora de la noche por tus hijos, sin dudarlo.
No necesitas más fuerza de voluntad sino una manera de abordar el tema que funcione: la imaginación supera a la fuerza de voluntad siempre.
Empieza a analizar las razones por las que comes en exceso e imagina soluciones, estrategias efectivas. Fíjate en por qué y cuándo comes en exceso siempre hay una razón y no es porque seas débil o vago. Cuando encuentres respuestas imagina como puedes satisfacer estas razones realmente, como puedes superar estos momentos sin recurrir a la comida.
Utiliza la imaginación para motivarte. Piensa en como será cuando tengas el cuerpo que tú quieres tener. Imagina qué y como te sentirás: saludable, atractivo, ligero. Piensa en las reacciones de las personas que te conocen. Imaginarte en ese cuerpo, la movilidad, la agilidad y flexibilidad. . . lo que sea realmente importante para ti. Eso es lo más motivador y si estás motivado, si crees en ti mismo, no necesitas fuerza de voluntad.
Estrategias potenciadas con el uso de la hipnosis en las que interviene la imaginación, el deseo, la visualización, el cambio de creencias, la programación mental, tu autoimagen, prestar más atención al lenguaje, a los sentimientos. . . son mucho más efectivas que la fuerza de voluntad para adelgazar.
Se trata de generar nuevos hábitos, un nuevo estilo de vida. Establecer claramente cuál es tu objetivo y encontrar algo que te dirija hacia un nuevo futuro. Y al avanzar prémiate por los éxitos que obtengas. Busca objetivos realistas, a corto plazo, que te hagan sentir bien y pongan una sonrisa en tu cara y así todo es más fácil.
En Hipnosis para Todos hemos creado el curso Tu Cuerpo Ideal con Programación Mental utilizando estos y otros recursos para generar un cambio en tu manera de pensar, sentir y actuar. Hasta adquirir los hábitos que te permitan alcanzar tu objetivo, Tu Cuerpo Ideal. Un cambio sostenible, de dentro a fuera, permanente: que no dependa de tu fuerza de voluntad.
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Parece que, a pesar de que la experiencia nos demuestra lo contrario, creemos que la próxima vez será diferente. De alguna manera misteriosa la fuerza de voluntad surgirá de manera espontánea y conseguiremos nuestro objetivo. Pero:
Todos tenemos una cantidad determinada de fuerza de voluntad, tarde o temprano se acaba como la batería del móvil. Piensa en la cantidad de veces que tienes que superar situaciones en las que tienes que renunciar a algo que te apetece a lo largo del día, día tras día. Si lo tienes que hacer a base de fuerza de voluntad es algo agotador, casi sobrehumano.
Además la fuerza de voluntad requiere concentración. Tenemos que tener muy claro lo que tenemos que hacer y además tenerlo presente todo el tiempo. Pero en la vida constantemente suceden cosas que nos distraen. Comer fuera de casa, un disgusto, una fiesta y olvidamos rápidamente nuestros buenos propósitos.
Al hacer cualquier plan basado en la fuerza de voluntad utilizamos nuestra mente racional. “Sabemos” lo que queremos hacer. Pero a la hora de comer lo racional pasa a segundo plano y aparece nuestro mundo emocional. “Sentimos” hambre, a veces, porque estamos estresados, ansiosos, cansados, enfadados. . . La comida es a menudo una recompensa que nos concedemos y comemos automáticamente todo lo que pensamos sobre el tema no cuenta, no sirve
Decirte a ti mismo que lo que necesitas es ser más fuerte, en realidad otra persona, y pensar que la fuerza de voluntad crecerá mágicamente no es una solución realista. Creer que lo que necesitas es más fuerza de voluntad sólo te genera estrés y frustración lo contrario de lo que necesitas. Deja de sentirte culpable por no ser fuerte sólo te perjudica. Piensa en la fuerza de voluntad que tienes cada día para levantarte y trabajar, en como te despiertas a cualquier hora de la noche por tus hijos, sin dudarlo.
No necesitas más fuerza de voluntad sino una manera de abordar el tema que funcione: la imaginación supera a la fuerza de voluntad siempre.
Empieza a analizar las razones por las que comes en exceso e imagina soluciones, estrategias efectivas. Fíjate en por qué y cuándo comes en exceso siempre hay una razón y no es porque seas débil o vago. Cuando encuentres respuestas imagina como puedes satisfacer estas razones realmente, como puedes superar estos momentos sin recurrir a la comida.
Utiliza la imaginación para motivarte. Piensa en como será cuando tengas el cuerpo que tú quieres tener. Imagina qué y como te sentirás: saludable, atractivo, ligero. Piensa en las reacciones de las personas que te conocen. Imaginarte en ese cuerpo, la movilidad, la agilidad y flexibilidad. . . lo que sea realmente importante para ti. Eso es lo más motivador y si estás motivado, si crees en ti mismo, no necesitas fuerza de voluntad.
Estrategias potenciadas con el uso de la hipnosis en las que interviene la imaginación, el deseo, la visualización, el cambio de creencias, la programación mental, tu autoimagen, prestar más atención al lenguaje, a los sentimientos. . . son mucho más efectivas que la fuerza de voluntad para adelgazar.
Se trata de generar nuevos hábitos, un nuevo estilo de vida. Establecer claramente cuál es tu objetivo y encontrar algo que te dirija hacia un nuevo futuro. Y al avanzar prémiate por los éxitos que obtengas. Busca objetivos realistas, a corto plazo, que te hagan sentir bien y pongan una sonrisa en tu cara y así todo es más fácil.
En Hipnosis para Todos hemos creado el curso Tu Cuerpo Ideal con Programación Mental utilizando estos y otros recursos para generar un cambio en tu manera de pensar, sentir y actuar. Hasta adquirir los hábitos que te permitan alcanzar tu objetivo, Tu Cuerpo Ideal. Un cambio sostenible, de dentro a fuera, permanente: que no dependa de tu fuerza de voluntad.
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